Los trajes típicos de México representan a cada una de las culturas y tradiciones que existen en nuestro país. El origen de algunos trajes típicos mexicanos se sitúa en la época prehispánica mientras que el de otros no va más allá del siglo XX. Ambos han logrado deslumbrar, tanto a mexicanos como extranjeros, por la calidad de su tela y la elegancia de sus bordados.
Conoce 5 de los mejores trajes típicos de nuestro país:
Guadalajara
El vestido femenino consta de una falda muy amplia, de tela llamada popelina, de diversos colores en tonos fuertes como el rojo, rosa mexicano, amarillo, azul. En la parte superior del frente del vestido hay muchos holanes, adornados con listones de colores alrededor.
En la parte inferior lleva un holán, el cual se tapiza de diez hileras de listones. Los listones son de colores que contrastan con la tela del vestido y la blusa es de manga hasta el codo, también adornada con holán, lleva la pechera alforzada y se adorna con idénticos listones y bolillo que la falda. Vestido blanco o de gala
Veracruz
De origen español, este hermoso atuendo evolucionó con el tiempo y se fueron sustituyendo poco a poco las telas oscuras y pesadas del traje español, por otras ligeras y frescas como el organdí, la muselina y el algodón. Así, paulatinamente se hicieron modificaciones y cambios de acuerdo con el clima y la vida en la playa.
En su traje típico sobresalen los detalles de elementos de colores sobre un fondo o lienzo blanco.
El traje típico de Veracruz se caracteriza en las mujeres por contar con una falda ancha y oleada de color blanco (decorada a mano con encajes y bordados valencianos), blusa del mismo color sin mangas, un delantal o mandil que suele ser de color negro en terciopelo y con decorados con temas de flores, un chal de seda, que suele ser amarillo o blanco y una mantilla de tul de algodón con bordados.
Chiapas
Sin duda alguna, uno de los trajes típicos mexicanos más hermosos es el de Chiapas. Consta de un elegante vestido negro, tapizado de flores que es como el encuentro del luto y la celebración de la vida y que se originó a mediados del siglo XX.
Antes de tener este profundo color, el traje fue blanco. Cambió cuando una mujer llamada Eloína Ríos Madrigal, quiso transformarlo así que tiñó con anilina negra el almidón. Después lo cortó, planchó y bordó con tonos matizados. A partir de entonces, el traje comenzó a usarse de color negro.
Cabe señalar que también existe el traje de los Parachicos. Este traje se compone de: pantalón negro, camisa blanca, faja roja, chalina bordada, sarape, un pañolón sobre la cabeza y amarrado al cuello y una máscara de color rosado.
Oaxaca
Las prendas que se aprecian al visitar Oaxaca, se confeccionan de acuerdo a cada región. Los trajes típicos son el resultado de una mezcla entre la cultura indígena y las técnicas coloniales, lo que da lugar al amplio abanico de colores en este estado.
Como parte de la vestimenta de Oaxaca, el traje de tehuana es uno de los trajes regionales mexicanos más conocidos. Corresponde a las mujeres de la etnia zapoteca, que habitan en el Istmo de Tehuantepec. Lo usan tanto las tehuanas como las juchitecas, sobre todo en sus fiestas civiles y religiosas, y por ello se dice que es un traje vivo.
El traje está integrado por 2 piezas básicas, el huipil y la falda. Según la ocasión es el bordado, generalmente de flores, y la tela sobre la cual se borda suele ser satín blanco y/o terciopelo negro.
Aguascalientes
Este estado es llamado así por los abundantes manantiales de agua cálida que había durante la Colonia. Su traje típico lleva el nombre de “traje representativo oficial de Aguascalientes.” El diseño del traje típico original es de Jorge Campos Espino. Para hacerlo, tomó como modelo los trajes que tanto hacendadas como campesinas usaban a principios del siglo XX.
El traje consta de una blusa con cuello alto, mangas amplias de los hombros a los codos y ajustadas de los codos a las muñecas y falda amplia. Este traje resalta por el hermoso trabajo de deshilado y bordado. En la falda suele bordarse a mano o a máquina, la “balaustrada del Jardín de San Marcos”. Los colores del atuendo pueden variar.